viernes, 30 de agosto de 2013

LA COLADA

Domingo día de colada, las mujeres no salen a vender y en su "día de descanso" se dedican a lavar la ropa de toda la familia.Aquí no hay agua corriente al menos en las casas de la gente humilde, así que la que utilizan a diario la sacan de los pozos que están por todos los barrios.
 El enjabonado de la ropa y al aclarado lo hacen con recipientes de aluminio que lo mismo les sirven para transportar mercancías durante la semana que para lavar a los pequeños en ellos. Después la ropa la ponen a secar extendida sobre el suelo.
 En los poblados que yo tengo más cerca no tienen problemas de espacio para ello, porque tienen la playa a un lado y el campo al otro, vamos que viven "a cotê de la mer" como nosotros. Pero las personas que viven más al centro de la ciudad en diminutas viviendas y en calles transitadas, no tienen más remedio que salir a espacios abiertos y amplios a donde hacer su colada, por eso se van "a cotê de la mer".
Me gusta ver los domingos las extensiones coloridas de ropa puesta a secar sobre la arena y bajo el sol, mientras las mujeres descansan a la sombra de las palmeras. Hay grupos que charlan, otras están acompañadas por sus familias, algunas hacen la siesta y se toman un merecido descanso mientras el aire y el sol terminan la colada. Bueno después me imagino que viene el planchado, y este lo hacen con planchas de carbón porque  en la mayoría de casas no hay electricidad.
 Por ahí se van a ahorrar los sofocones que nos que dan que pasar a los españoles con la factura de la luz y la estafa de las hidroeléctricas, mente positiva, siempre mente positiva.
 Bueno, cambiando de tercio, vosotras diréis pobrecitas esas mujeres lavando a mano, dobladas por la cintura sobre recipientes llenos de agua jabonosa, restregando con los nudillos pelados y aclarando en otros recipientes a la misma altura con la cintura igual de doblada, provocándole dolores de riñones y lumbalgia... Por no tener lavadora!. Pues esa soy yo. Bueno lavadora tengo aquí en un dormitorio que como está vacío lo tenemos de desahogo, que diría mi madre. Las maletas, los avíos de pesca, el equipo de sonido e iluminación para los grandes eventos, el tendedero...Y una lavadora monísima de primera marca que tiene que lavar estupendamente. Eso que me lo imagino yo, pero está sin instalar, yo creo que me la van a instalar cuando el porche. 
Así que aquí me veo con mis dos marcas de detergentes preferidas que no me digáis que no tienen solera, sino preguntadle a vuestras madres o a las abuelas.

P.D. Ya tengo lavadora!!! pero la entrada estaba escrita de antes y no me he podido resistir. Hoy voy a poner mi primer lavado, estoy deseando oír el zumbido de esa maquina maravillosa.

jueves, 29 de agosto de 2013

LA APUESTA

 A las cinco de la mañana empieza la rutina en Lomé. En los barrios humildes ves a las mujeres dándole un enjabonado a los niños que me recuerdan a mi abuela cuando fregaba el almirez de aquellos dorados que había que restregar enérgicamente para  mantenerlo brillante.  A otras las ves dobladas barriendo el suelo con pequeñas escobas hechas con varas cortas de alguna planta flexible y por barrer barren hasta las carreteras.
 Llevan sobre sus cabezas bultos impresionantes, de cosas para vender porque eso sí, todas  venden algo: verduras de su propia cosecha, pescado fresco o ahumado que preparan ellas, productos de perfumería, el otro día vi a una señora con una palangana enorme que llevaba pasta de dientes de todas las marcas y tamaños, comidas  preparadas en montañas de bolsitas de plástico anudadas, con un liquido lechoso o papilla que chupan como hacíamos nosotros con los flas congelados, así también toma todo el mundo el agua que  compran en bolsas.
 Otras portan sobre sus cabezas todo lo necesario para el puesto que van a montar para vender lo que sea y llevan el taburete la mesita si es pequeña, si es grande se queda en el punto de venta, la vitrina don guardaran los dulces o empanadas y lo que a mi me maravilla es cuando las veo con huevos, si como lo oís montañas de huevos con un equilíbrio que ríete tú de los del circo del sol.
 Carlos se picó un poco el día que se lo dije porque dice él que los huevos son cocidos, como si por eso ya fuese tarea fácil y pienso yo que lo que cambia es el resultado en caso de que cayeran al suelo.Nosotros esque somos muy de discutir sobre temas importantes. No obstante él empezó a practicar ese día. Pero claro comenzó por cosas fáciles, que no pesan, papel de cocina, papel higiénico y cosas así. Luego ya se fué animando y probó con seres vivos, una langosta de las que acababa de comprar ese día. Pero yo seguía defendiendo a esas mujeres trabajadoras a muerte. El seguía pensando que el las podía igualar, claro, a pie parado, no como ellas que van caminando y la mayoría con el niño a la espalda. Empezó a ensayar en movimiento y me retó. Vamos que hicimos una apuesta, se apostó conmigo 10.000 cefas, que es como llaman aquí a los francos, A que iba con un cesto en la cabeza, uno que compré yo muy mono porque a mi las cosas hechas a mano me encantan.  Nos apostamos esa cantidad, a que iba con el cesto en la cabeza desde la entrada de la casa, al fondo del salón, que es lo más largo que se puede recorrer en nuestra vivienda. Yo pensé que el cesto era tan ligero que no iba a poder mantenerlo en equilibrio, no pesaba nada.
 Perdí la apuesta, recorrió la distancia acordada pero con el cesto bocabajo metido en la cabeza.
      Una que tiene muy poca maldad y él que es más tramposooo!
.                          

miércoles, 28 de agosto de 2013

EL CICLO DE LA VIDA

  Habéis visto "el rey león"? Yo también, más veces de las que ahora me gustaría admitir. Cuando mis hijas eran pequeñas eran muy de Disney ellas, como casi todos los niños. No había peli de la gran factoría que no nos absorbiese en la vorágine de promoción y que nosotros no convirtiésemos en parte de nuestras vidas. Cuando el estreno tenía lugar ya teníamos tazas, mochilas, libros, camisetas, todo tipo de artículos con los personajes del momento. Luego la veíamos tantas veces que no solo nos aprendíamos las canciones, además terminábamos aprendiéndonos el guión, fijaos de que manera, que una vez oímos a Carlos hablando en sueños que decía:
- Wendy pajáro, Wendy pájaro... Era la época en que a la pequeña le dió por Peter Pan.
Bueno pero volviendo al rey león. Recordáis "el ciclo de la vida"?. Y el grito ese tan bonito con que empieza la canción?. Pués con uno así pero más fuerte y menos musical porque claro el marketing de la factoría Disney no lo tenía, nos han despertado esta mañana antes de las cinco.
Hemos dado los dos un bote en la cama! Porque esque parecía que teníamos a Rafiki dentro de la habitación. Que susto !madre mía! Carlos dice que eso no se hace y de paso ha estado repasando el árbol genealógico del cantante incluidos los difuntos.
Aquí son muy  de celebrar ceremonias y ritos raros, por las mañanas cuando salgo temprano a ver el mar veo unos rituales rarísimos en la orilla. Hace unos días una pareja de mediana edad con  un muchacho cogidos de las manos los tres rezaban a grito pelado levantaban las manos imploraban al cielo se echaban agua por la cabeza se volvían a coger de las manos... Ayer un hombre tenía a una señora con el agua a la altura de la cadera y rezaba mirando al mar luego la mojaba luego rezaba otra vez, mientras en la arena una señora traspuesta sentada en el suelo como poseída o bueno como si se hubiera llevado un disgusto muy grande la pobre, rodeada por un grupo de gente que le tiraba de los brazos y  daban unos lamentos! Y los otros le cantaban o rezaban o que se yo.
 Aquí es muy natural llevar a los extranjeros a un ritual de budú, pero yo no podría presenciarlo porque hacen en él sacrificios de animales y en el último que han presenciado conocidos de aquí mataron un toro, un perro, alguna cabra, palomas y no sé cuantos animales más para ofrecer su sangre a los dioses  a cambio de protección, para ellos, no para los animales evidentemente.
Así que el de esta mañana paraba el lamento y cantaba un rato a grito pelado y luego volvía al lamento y después al canto... Carlos estaba también con su ritual matutino en el baño,  con su pagina de marca online y dando casi las mismas voces que el de la tapia decía:
-Pero este tío que haceeee?  no se podía poner más "pallá" con sus . ( acompañado de sus difuntos).
- No podía despertarme a mí un gallo, Dios mío! como en las otras casas. Es verdad que antes de llegar yo aquí él ha vivido en dos casas compartidas con compañeros y que las casas estaban  rodeadas de huertos  familiares y en ellos había animalitos sueltos: cabritas, gallinas y algún gallo. Al alba ese animalito lanzaba su canto despertando a todo el mundo pero a una distancia razonable,porque la casa además estaba rodeada de jardín y no a cuarenta centímetros de la cabecera, cabecera que tiene un ventanal más ancho que la cama, que tambien tuvieron una vista para poner el ventanal  a cuarenta centímetros de una tapia.Pero en fin yo creo que el hombre se puso aquí cerca nuestra por no molestar a la gente del poblado sin acordarse que justo detrás de la tapia esta nuestra casa. Porque aquí la gente no son de molestar.
Solo le pido al universo que el de hoy no sea el primero de muchos rituales.
Esperemos que veamos aquí la ley de la atracción también, la nuestra, no la de Rafiki.

martes, 27 de agosto de 2013

LOS BENEFICIOS DEL AGUA DE MAR

 Antes de venir a vivir aquí, cuando Carlos ya le había echado el ojo a la casita de la playa, le dijeron que no sabían si íbamos a poder dormir con el sonido del mar porque estamos delante de la primera linea de mar. Pero él tenía tantas ganas de pescar en la puerta de casa y una que es más... espiritual,  ver todos los días la puesta del sol, el amanecer junto al mar, caminar por la orilla, sentirlo, olerlo, probarlo y lo de probarlo es literal.
 Yo llevaba mucho tiempo leyendo sobre los beneficios del agua de mar para nuestra salud y gracias a internet comencé a seguir todo lo que tenía que ver con este tema y a leer lo que personas como Angel Gracia y otros habían escrito, y deseaba estar cerca del mar para beber su agua.
 Y aquí que entra en acción la ley de la atracción de nuevo, estamos "a cotê de la mer". Vamos más cerca imposible.
 El amanecer lo que es el amanecer no he podido verlo todavía, más que nada porque a las cinco de la mañana cuando nos levantamos ya es de día a ver si le hecho un día voluntad y me levanto antes todavía, que tiene guasa pero en fin.
 La puesta de sol tampoco he podido disfrutarla como yo imaginaba, porque es al revés, bueno es una forma de hablar, la puesta de sol es como tiene que ser, lo que quiero decir es que no se pone por el mar sino por la tapia que tenemos detrás de casa, y así como que no es lo mismo, donde va a parar, pierde mucho glamour. Yo que recordaba el atardecer en la playa del Palmar cerca de Conil  en Cadiz con esa esfera anaranjada perdiendose en el horizonte...Pues nada que ver.
 Sentirlo...Bueno sentirlo de los tobillos para abajo, que también pierde mucho como lo del sol. Pero está nublado a diario, de hecho aquí es invierno el mar esta un tanto revuelto y la playa aquí delante de casa es de esas de las que andas un metro y te llega al hombro de la inclinación que tiene la arena por lo que descartamos también las largas caminatas. Por aquello de evitar una luxación de cadera más que nada que ya no tiene una edad de tonterías.
 Lo de olerlo como que cuando estás tan cerca te acostumbras al olor que llamó mi atención el primer día y el resto de días pasa desapercibido.
 Y lo de probarlo... como lo explico? probarlo lo probé pero en la clandestinidad, vamos sin decir ni mu a Carlos, porque yo sabía que iba a poner el grito en el cielo. Así que la primera semana empecé a tomar un poco por las mañanas y sin problema pero antes de que pudiese notar los beneficios del liquido y salado elemento en mi cuerpo tuve unos problemillas intestinales, que los tiene todo el que llega Africa por primera vez; yo pienso que fue por marisco que comí ya que lo aborrecí de una forma increíble , además de que a él le sigue pasando cada vez que come langosta pero el piensa que lo mío fué por el agua de mar. Y ahí andamos en esa discusión pero ayer me mando mi hermana (que es mi fuente de conocimientos) unos enlaces y un video hablando sobre este tema y hoy comienzo de nuevo a tomarla y ya os comentaré el resultado.

P.D. Como una piensa en positivo y le ve el lado bueno a todo, os diré que los problemas intestinales me hicieron perder tres kilos y yo encantada. Me lo noté cantidad en la foto que me hice esa semana y sabeis que? Que ahora es mi foto de portada en Facebook.  (Yo tampoco he puesto las fotos en la red al azar  os lo aseguro he escogido las mejores como todo el mundo...)

sábado, 24 de agosto de 2013

UN DOMINGO MAS

  Otro domingo más, nuestro día de descanso, bueno de Carlos. Así que salimos a dar una vuelta cámara en ristre a ver que nos depara el día. Primero vamos al supermercado a comprar algunas cosillas para la semana, por aquello de no perder nuestra identidad de consumidores natos.
 Después tomamos una cervecita. Hay costumbres que se mantienen vayamos a donde vayamos. La tomamos en un bar que queda cerca del supermercado rodeado de coloridos puestos de frutas. Nos atiende una muchacha muy simpática y nos trae de momento las dos cervezas con tapa. Vosotros diréis que detalle ... Pues no aquí la tapa es literal, un trozo de plástico o madera indistintamente, para cubrir la cerveza y evitar así que en ella caigan moscas. Que entonces si que sería con tapa y literal.
 Nos sentamos bajo un dibujo en la pared de un señor con pinta de tirolés sonriente y abrigado para estas latitudes.
Con su chaqueta verde sus tirantes y su sombrero con pluma y todo que pegaba en el entorno lo mismo que nosotros, osea nada. Luego pensé yo que claro a la gente de aquí eso debe de resultarle exótico. Pasamos un rato agradable, embobados con la gente que pasaba los que vendían los que compraban los que entraban y salían del bar... En fin lo que es viendo pasar la vida, entre el señor de Bavaria y el colorido del trópico.
 El resto del día hicimos lo mismo pero en el Ramatou, el restaurante de nuestro amigo Paco que los domingos está muy ambientado y "a cotê de la mer". Expresión que Carlos repite mucho desde que la aprendió: El trabaja "a cotê de la mer" en el puerto. Nuestra casita está "a cotê de la mer" en la playa y en fin que nuestra vida transcurre "a cotê de la mer" y el día que salga el sol se vayan estas ventoleras y se lleven estos nublados vamos a estar estupendamente "a cotê de la mer".

viernes, 23 de agosto de 2013

LA FOTO PARA EL VISADO

 Necesito fotos de carnet para el visado. Cuando llegué a Lomé en el aeropuerto me dieron uno, no sé si recordaréis que estuve dos horas allí, que a lo mejor hubieran sido más si afuera "en el bar" no se hubieran movido algunos hilos de la burocracia togolesa...
 Pero ese era válido solo para una semana, el siguiente para todo un mes me lo tramitaría la empresa de Carlos aquí, por eso necesito las fotos.
 Pero aquí " il n'y a pas probleme" que dice mucho Carlos, que va mejorando su francés por día.
Vino Basil,el chofer, a recogerme para ir al centro de la ciudad. Nada más acercarnos a la zona un muchacho que nos ve y ya sabe a lo que vamos, antes de parar el coche ya lo tengo junto a mi ventanilla diciendo fotó, fotó y disparándome con una cámara invisible.
Seguimos al captador de clientes por una calle llena de taxi-motos y puestos de todo lo imaginable y lo inimaginable, llegamos a un edificio de oficinas de mármol gris, aluminio y cristal  en cuya planta baja había un pasaje comercial muy tranquilo porque la mayoría de locales estaban vacíos y cerrados con el cartel de se alquila o se vende. Allí en el hall del pasaje Basil y el muchacho empiezan a discutir imaginé que por el precio, aquí se discute mucho por eso y aunque se estén saludando y preguntándose por la familia suena a discusión acalorada. De vez en cuando entraba alguien por donde nosotros lo habíamos hecho o por el lado opuesto del pasaje y me saludaban amablemente y yo les correspondía, mientras la discusión continuaba.
 Estabámos ante una agencia de viajes marroquí uno de los pocos locales comerciales en los que se veía movimiento y cuyos empleados nos miraban de soslayo.
 Cerca de mí había un muchacho muy alto con un gorrito y un bolso en bandolera paseándose y esperando como yo. Me tenía alucinada por la altura intentaba calcular en centímetros, si son 1'80 como Carlos o hasta 1'90 o 1'95 como mis sobrinos vale, pero cuando pasan de dos metros me pierdo calculando.
 Los de la discusión llegaron a un acuerdo y yo pensé ahora pasaremos al estudio. El de la NBA, que al final era el ayudante de fotografía! A una señal imperceptible del otro puso la bandolera en el alfeizar de uno de los ventanales, me colocaron a mi en un taburete pequeño hecho con cuatro tablitas que yo no había visto de lo pequeño que era. Me senté en él y mientras el alto sacaba la cámara el otro muy profesional me pidió permiso para colocarme bien la rebeca, quitarme un mechón del cuello ponerme bien el flequillo...Para nada porque salgo fatal en las fotos.
 Yo estaba en el banquito altura de guardería delante de un local cerrado de mármol, aluminio y cristal pensando este fondo no va a valer!..." Il n'y a pas probleme" , a una señal de nuevo imperceptible el de la NBA sacó un trapito doblado de la bandolera, lo desdobló lo sacudió que me recordó a los barberos antiguos  y lo sostuvo por las dos esquinas superiores detrás de mi que parecía que me iba a poner un par de banderillas, muy estirado para no rozarme a mi y no salir en la foto, claro!
Hizo dos disparos, me las mostró para que eligiera, dudé porque en una estaba mal y en la otra peor, no por culpa del muchacho que fue todo un profesional..
 En este punto los de la agencia lo habían  dejado todo de lado por nosotros, pero lo que esa bandolera dio de si !! Cuando el auxiliar dobló el trapito sacó una cajita  de cartón y de ella una impresora la mar de recogidita, también sacó un sobre de papel marrón abultado, de él el papel de fotografía y en un santiamén estuvieron listas mis fotos. Basil pidió factura y eso trajo consigo otro problemilla y su discusión correspondiente porque el muchacho quería darnos la factura de 1000 francos cobrándonos 2000. Aquí el de air marruecos había salido a fumarse un cigarro estaba embobado.
Allá que nos fuimos Basil y yo con las fotos, que pienso yo que cuando esté todo arreglado, también estará el mes ya pasado y necesitaré otro visado "Porque esto es Africa". Ya estoy como mi marido ... y como ShaKira.

jueves, 22 de agosto de 2013

LA LEY DE LA ATRACCIÓN

 Mi padre trabajó en Francia unos meses de eso hace ya mucho, mucho tiempo. Bueno tampoco tanto cuando yo iba a nacer. Sus dificultades con el idioma se convirtieron en anécdotas contadas mil veces en las reuniones familiares. Fueron malentendidos sin importancia con los tenderos: el panadero, el frutero...Cosas que le pasaron a él pero a mi no me iban a pasar. Tonta de mi, teniendo en cuenta mi base en lengua extranjera.
 Estaba ante el mostrador expositor de la charcutería, explicándole a la dependiente que quería el mismo jamón para sandwiches español que me había llevado la semana anterior. La muchacha lo cogió de momento (es la de la bata blanca de la foto, la de rojo es la reponedóra) y yo pensé: hay que ver lo bien que me desenvuelvo ya y eso que acabo de llegar como quien dice. Se pusieron a atendernos a mi y a otros clientes porque son de atender a varios a la vez o quizás lo hagan para retener a Carlos más tiempo en el súper porque el rato que está allí es una fiesta y no paran de reir.
 Los vi preparando bocadillos para una muchacha que esperaba a mi lado y luego empezaron a preparar uno muy grande en una bagette entera y me pregunta que si lo quiero con queso, fromage que dicen ellos y pensé yo "tate" este es para mi. En eso que se acerca Carlos muy contento al oir la conversación sobre los ingredientes del bocadillo.
 -¿ Has pedido un bocata no? me has adivinado el pensamiento. Voy a por dos cervecitas fresquitas para comérnoslo en el coche.
 Es o no la ley de la atracción? que lo que mi marido tenía en mente se le materializó en cero coma.
 Nada fué por nuestra cervecita y de paso como hace siempre coger también para los empleados del super que menos mal que no es una gran superficie y allá que sale de la mano de uno de ellos al que llama "ma cheri" ante las carcajadas de sus compañeros.
P.D. El de la camiseta de sisa llevaba bata un rato antes cuando le dije que las fotos las veríais mucha gente se la quitó para el posado. A mi me hizo Carlos alguna con ellos y salían sospechosamente borrosas. Cuando les expliqué que pensaba que Carlos no quería que me vieran con unos muchachos tan fuertes el posado se salió de madre.

miércoles, 21 de agosto de 2013

INAUGURADA LA TEMPORADA DE PESCA

 El jueves fue día de elecciones en Togo, por lo tanto no se trabajó. Carlos quedó con un compañero para inaugurar oficialmente la temporada de pesca en nuestra casita de la playa. Serge que así se llama el compañero es belga, si belga y se entienden estupendamente, no me preguntéis cómo porque ni Carlos habla francés ni él español. Pero se entienden la mar de bien, ya han pasado tantas horas juntos... Cuando empezó su amistad y me decía que había charlado con Serge o salido a tomar una cerveza. Le preguntaba: Carlos os entendéis? A lo que el  respondía.
 - No nada, pero es más simpático, se enrrolla, se enrrolla el tío.
 Pero lo que es ponerle voluntad a las cosas. Ahora se entienden os lo aseguro.
 Serge trajo un foco de la obra que parecía del nou camp, para alumbrar la playa. Estoy segura que los negritos del poblado de al lado estarían alucinados con la luminaria. Seguro que pensaron al ver los preparativos y la iluminación que iba a haber un evento de más magnitud, no era para menos.
 Ahí que se pusieron ellos a preparar unas cañitas y otras, yo les preparé unos sandwiches y de vez en cuando Carlos venía dentro de casa nervioso y feliz a darme las novedades. Yo no pude acompañarlos porque hizo una noche de frío y de viento, hasta les llovió un poco. Pero ellos como si nada. Lo que es la afición eh?
 De momento oí a Carlos dándome voces y me lo imaginé habían picado. Cuando salí venía ya a enseñarme la captura que daba coletazos intentando soltarse del anzuelo la pobre, cosa que a mi me pone el cuerpo malo. Lo que es la falta de afición eh?
 Pero una cosa os digo: solo por verle a él la cara de felicidad, a Carlos no al pescado, ha merecido la pena llegar hasta aquí.
 A Carlos le gusta mucho la pesca, el único deporte que practica "in situ" los otros son de sofá el fútbol el tenis etc... Pero no solo disfruta en el momento de tirar las cañas si no preparándolas y lo que es más extraño limpiando luego el pescado. A mi en cambio me pasa como con los toros, sufro mucho de ver a ese animalito agonizando en el fregadero, al pescado claro no al toro.
 Fijaros si le gusta pescar que lo ha hecho con la grúa con la que trabaja ahora. Si como lo oís, estando yo todavía en España y trabajando él en el turno de noche sacó dos langostas y algún que otro pescado con la grúa. La grúa es para verla levanta setenta toneladas y tiene una pluma o brazo para los que no entendáis de estas cosas de sesenta y un metros. Le puso su poquito sedal, su poquito de cebo y el teléfono de momento sonando en Sevilla  y él con la misma ilusión que cuando sacó la dorada, es más "apañao pa las cosas que le gustan!
 Otra vez que veo yo aquí la ley de la atracción o del universo o... o que es muy "cansino" que dirían en su tierra
... como se le meta a él algo en la cabeza...

martes, 20 de agosto de 2013

EL PORCHE

 Van pasando los días y nos vamos creando una rutina, ya ha pasado casi un mes desde mi llegada  y la casita va mejorando eso si poquito a poco. Tenemos cortinas muy monas y muy étnicas, el microondas que estaba apoyado sobre una caja de cartón ya está sobre una balda muy rústica y también muy mona. Pero hay un problemilla, que al estar más alto el cable no llega al enchufe además de que la alargadera que tengo no sirve para ponerla directa a la pared. Porque con los enchufes pasa como con los idiomas en cada sitio es distinto: México, Chile, Reino Unido, Togo, cada uno el suyo. Cuando se llega a un sitio tienes que comprar adaptadores, que es lo mismo que el traductor o el diccionario para la cosa de la lengua. Bueno resumiendo que tuve que empalmar tres alargaderas que atravesaban el salón como la diagonal a Barcelona.
 Pero esto ha sido cosa de pocos días. 
 También nos han puesto un grifo fuera para que en las tardes calurosas de verano reguemos el suelo del porche, el día que tengamos porche. Ese es otro de los acabados pendientes como la valla de alrededor de la casita para darnos un poquito de intimidad. Porque poco después de ponernos el grifo de fuera yo hablaba con Carlos por teléfono y oí el sonido del agua corriendo, me asomé y vi a un señor con pinta de rastafari cogiendo agua y dió el hombre unos pocos de viajes ante mi asombro. Se ve que el hombre es de por aquí cerca, porque no tardaba en ir y volver. Me da pena que le cortaran al hombre el rollo y el suministro pero claro que si lo hubiesen dejado y se corre la voz por el poblado.
 Carlos que no se parece a mi en lo de la mente positiva, tampoco le ha dedicado el tiempo a leer sobre estos temas como una, él cree que para cuando esté el porche y la valla nosotros no estaremos aquí, es más negativo!, lo peor es que va a llevar razón.

PROBLEMAS DE HUMEDAD


 Llegó el fin de semana, no hay que madrugar. Pero ya estamos en esa fase de necesitar dormir menos, fase que por cierto me creía yo que tardaría más en llegar por aquello del espíritu joven que tenemos, pero ha llegado. Antes de la siete de la mañana ya está Carlos poniéndose el primer café, encendiendo el primer cigarro y con el PC camino del baño.
 Yo quiero ver al mar nada más levantarme, así que me voy a abrir la puerta de casa y: oh, oh!!! No puedo abrir.
 Junto a la puerta hay un interruptor de la luz y cuando abrimos y cerramos la puerta roza en él y la luz de la cocina se enciende o se apaga, indistintamente. Porque aquí al construir miden poco, bueno, ni mucho ni poco, no miden. Pero claro la humedad que aquí es mucha, lo de estar en primera linea de playa que tiene su precio, en este caso es diez veces más de humedad, total que entre unas cosa y otra la puerta está chorreando se ha hinchado y ahora en vez  rozar el interruptor suavemente y hacer que se apague o encienda la luz de la cocina, indistintamente, choca con la llave y la puerta no podía abrirse.
 Yo que le llevo dedicando cantidad de horas a búsquedas y lecturas sobre el pensamiento positivo las leyes del universo el fluir de la energía y el poder de la mente , pensé: menos mal que es domingo y está Carlos en casa porque si no hubiera tenido que estar encerrada beaucoup, beaucoup de tiempo, que diría mi marido en su cada vez más amplio vocabulario francés. o también podrían haber avisado a alguno de los muchachos que están por aquí cerca trabajando...no, mejor no.



lunes, 19 de agosto de 2013

LAS CORTINAS

 La casita de la playa no tiene cortinas,así que hoy hemos ido a comprarlas al "grande marchê", en español el mercado grande.
 El chofer de Carlos nos ha llevado a una muchacha de aquí y a mi. Ha sido alucinante, también un poco agobiante, nunca había visto nada parecido. Puestos de ropa, zapatos, pelucas, comida y telas muchas telas. Con los estampados más coloridos que os podáis imaginar.
 Entramos en el primer puesto de poco más de un metro cuadrado con las paredes completamente cubiertas por piezas de tela. Aquí las telas se suelen vender por piezas de poco más de diez metros porque así es más económico que el corte para una sola prenda. No es raro ver a una familia el domingo vestidos todos conjuntados, el pantalón y la camisa del padre con el vestido de su señora y alguno de los pequeños a juego con ellos.
 Cuando miraba las paredes se me ocurrió si no sería así el efecto del LSD de los sesenta. Increíble empezó a dolerme la cabeza. No me parecían muy relajantes para nuestra casita. Pero ocurre que aquí se acostumbra a poner todas las cortinas de una casa de la misma tela como el fondo de armario de algunas familias por aquello de la economía y decían que no había dos piezas iguales. A mi eso me parecía imposible de saber y mira que yo tengo practica en el majhon. Pero por ahí me libré, no pudo ser.
 Entramos en el segundo puesto que era un poco más espacioso aunque había en él el mismo número de personas dentro: una señora muy guapa sentada en una silla baja, dos jóvenes que desdoblaban y doblaban las telas que queríamos ver con pericia pero sin prisa, un señor metido en un cubículo de cristal que no se yo si sería el cajero el administrador o el marido de la señora de la silla y otra señora que más que empleada parecía la cuñada que hubiera venido a echar un ratito. Eso sí todos se mimetizaban perfectamente con el fondo de la tienda porque todos iban vestidos con telas de estampados vistosos. En este sitio las telas eran más monas, después de decirle que no a unas con fondo negro y dragones rojos con un brillo sospechosamente festivo me decidí por unas que darán ese aire acogedor a nuestra casita de la playa.

CENA DE CUMPLEAÑOS

 Carlos es muy sociable, los que lo conocéis lo sabéis bien. Justo una semana después de mi llegada hemos organizado una cena para celebrar su cumpleaños y de paso para que yo conociese a algunos de sus compañeros y amigos de aquí. No sabíamos como iba a resultar por aquello del idioma ya que eramos cinco franceses, un belga, un señor de Guinea bissau, su novia que es de Benin y seis españoles.
 Todos fueron un encanto e hicieron un esfuerzo por comprender y dejarse entender. La cosa fué bien desde el principio yo conversé con todos como pude, el belga se pasó la noche gritando mi nombre con voz de barítono y sin pronunciar la erre: "Ana Maguiiiia". Dice Carlos que así llevaba una semana gritando mi nombre al pasar junto a la maquina con la que él trabaja.
 Los franceses unos mas charlatanes otros más tímidos pero todos muy simpáticos, el señor de Guinea hablaba muy bien español a pesar de que su idioma es el portugués, su novia una muchacha guapísima pero muy calladita no dió un ruido en toda la noche y los españoles, que decir de ellos que eran un encanto y fueron nuestra tabla de salvación,porque eso de hablar en otra lengua agota sobre todo si no se sabe.
 Hizo una noche estupenda todo el mundo encantado con la situación de la casa y echamos un ratito muy bueno. El menú una caldereta con productos del mar, ensaladilla de gambas que es mi especialidad, tortilla de patatas que no lo es, pinchitos de pollo con aliño traído para la ocasión desde Sevilla uno de los encargos de mi marido, que si me abren la maleta en París los de aduanas se quedan muertos: los avíos de pesca de mis cinco viajes a Decathlon, morcón, mojama, jamón, un surtido de latas de lo más variado, aliño de pinchitos etc... y no se cuantas cosas más.
 Carlos había encargado vino español, como la Piquér en tierra extraña. Aunque ni la reunión fué toda de españoles ni por España se brindó ni un pasodoble se oyó que nos hiciera estremecer como a los de Nueva York. Que ya lo hubiéramos querido ya, en cambio vino un grupito de reggae autóctono que nos dijeron que cantarían tres o cuatro temas suyos y que nos costaría cinco mil francos. Pero yo les pregunté a los pobres que si querían tomar algo y me perdí, unos que cocacola otros que unas cervecitas y alguno un whisy, total que le tuvimos que dar diez mil para que se fueran.

sábado, 17 de agosto de 2013

PROBLEMILLAS DOMESTICOS

 De momento tenemos unos problemillas domésticos que espero se solucionen pronto, porque al ser nueva la vivienda y "porque esto es Africa" como diría Shakira y mi marido, quedan detalles que ultimar. No tenemos agua caliente, internet, batidora, plancha etc... Pero tenemos salud que es lo importante como diría cualquiera el día después del sorteo de Navidad.
 Por fin han empezado a solucionar lo de los acabados, primero la presión de agua que era mínima, después el agua caliente. Alucinante ver trabajar a Manolo y Benito pero en togolés. Nunca había visto desenrroscar tuberías sin cortar antes el agua. Como es normal llegó al salón el liquido elemento. Quitar el termo eléctrico sin vaciarlo antes y sobre la cabeza de la susodicha pareja. Cuando por fin conectaron el termo de nuevo, el segundo, el primero lo habían descambiado por este porque según ellos no iba, decían que había que descambiar la ducha porque no  salía agua. Menos mal que llegó Carlos la limpió por dentro porque estaba obstruída y la colocó ante su asombro que le sonreían con los pulgares hacia arriba.
 Al poco de irse me dió un calambrazo de muerte uno de los tubos y gracias a eso estoy segura de que no olvidaremos jamás quitar el termo antes  de ducharnos.
 Pero pasaba otra cosa que el agua que debía salir como máximo a cuarenta grados salía al punto de ebullición. Que yo pensé:
 -Mira que si le cae a Manolo y Benito encima como hace un rato, se me escaldan los pobres.
 Me acordé de Carlos que se sofoca en el trabajo con ellos porque dice siempre que no ven el peligro. Comprendí que era cierto.
 Pero poquito a poco seguro que se va solucionando todo, eso si, muy poquito a poco "porque esto es Africa".
 Al día siguiente se presentaron con el tercer termo porque el del agua al punto de ebullición también lo descambiaron y ya se sabe que a la tercera va la vencida. Este esta un poco torcido pero parece que va bien y además que si no tuviese su "mijita" de gracia parecería que estamos en otro sitio y no en Africa.
 Tanbién tienen un sistema para poner las baldas en la pared buenísimo pero a mi marido no le hace ni chispa de gracia. Vamos que es como el de Ikea, sin escuadras ni nada, que queda monisimo pero no las puedes cargar mucho de peso. Carlos se acerca a las tablas :
 -Esto, esto? esto es una mierda... Dice dándole para arriba y para abajo a la tabla y me tiene el el alma en vilo.
 Le van a poner unas escuadritas.

LA LLEGADA A LOMÉ

Como era sabado el ambiente era festivo en las calles de Lomé. Había mucha gente y sonaba por todos lados una música alegre que invitaba a bailar. De hecho había gente bailando en cualquier lugar, más tarde supe que era a las puertas de los bares.
 Recorrimos varios kilómetros por una carretera asfaltada e iluminada acercándonos al centro de la ciudad. Una vez que salímos de ella, las calles eran de tierra y sin alumbrado. Solo algunas luces de camping gas en algunos puestos no en todos, iluminaban algo. Los puestos que estaban en la entrada de casi todas las casas por donde pasábamos, tenían las más diversas mercancías sobre mesitas construidas con maderas y cañas como las viviendas. En los improvisados mostradores había de todo, desde comestibles a productos de drogueria, cacahuetes, comida para llevar y muchas otras cosas que me era imposible identificar, por extrañas para mi y por la falta de luz.
 Llamaron mi atención unos puestos que congregaban a mucha gente delante mirando una pantalla de televisión pequeña. Me dijo Carlos que eso eran los videclubs, ya hemos visto luego a una niña que recoge el dinero a las personas que están viendo la película.
 Yo en el coche me sentía Gerard Piqué porque a mi lado mi marido no dejaba de repetirme:
-Ana, "porque esto es Africa".
 Por fin llegamos a la casita de la playa, que está en primera linea y lo primero que pensé es que los tsunamis no avisan, cosa que preocupaba mucho a mi madre y a mi suegra, si viene uno no tenemos escapatoria nos coge de lleno fijo.

LA PESCA

Una brisa suave entra por la puerta de la casa abierta y la imagen del mar calma la vista. Es nuestro segundo  día en la casita de la playa y también mi segundo día en Togo.
 Hay una cosa que me preocupa enormemente y es la pesca. A Carlos le gusta pescar, la primera vez que vino, preparó las cañas y demás avíos de pesca, para en sus ratos libres practicar en aguas togolesas. Pero!! No fué posible,porque los avíos llegaron con él pero las cañas no. Se quedaron en el aeropuerto de Sevilla a donde yo tuve que volver a recogerlas por un problemilla de facturación.
 Pero esta vez es diferente, en uno de mis viajes a Decathlon que di cinco, le compré una caña muy recogidita que cabía en mi maleta y ya se acabaron los problemas de facturación. Un compañero del trabajo le ha hecho unos pinchos para clavar en la arena y en ellos pondrá las cañas y en las puntas de las cañas unos cascabeles, de mi cuarto viaje a Decathlon, para que le avisen cuando piquen los pescados. Ya se imagina él tumbado en la puerta de casa con su cervecita, corriendo al son de los cascabeles a sacar pescado en abundancia.
 Preparados estamos por falta de avíos no va a quedar, no nos falta de "na". Vamos a ver como se da la pesca, la merluza está asegurada.
 A mi lo que me preocupa es que la playa está de noche como la boca de un lobo y con un trasiego de personas impresionante y todos tan negros que como no se vengan riendo no los ves, yo pienso: ¿no se enredará alguna criatura con las tanzas? Bueno ahí entrarían los cascabeles en acción.

P.D. He hablado con Carlos de mi preocupación y dice que no hay problema que el trasiego es solo durante el día. Confiemos en que no aparezca ningún noctambulo.
Carlos a la espera del sonido de los cascabeles. 

viernes, 16 de agosto de 2013

AEROPUERTO DE TOGO

Por fin ya estaba en Togo, con los mejores deseos del personal del avión, que hay que ver lo agradables que son, llevan su sonrisa de vuelo colocada hasta el final.
 Cuando bajé del avión me recibió una bofetada de calor húmedo que me acompaña hasta hoy. Después tuve que hacer una hora de cola para obtener el visado de entrada al país.
 El aeropuerto de Lomé es pequeño un solo espacio para todo y los más de trescientos pasajeros de mi vuelo lo invadimos literalmente.
 Sabía que Carlos estaría fuera esperándome y que intentaría por todos los medios contactar con alguien del aeropuerto para saber de mí  porque tardaba en salir e intentar ayudarme. Así fue, cuando ya lo había hecho todo, rellenado impresos, pagado para obtener el visado y solo esperaba que me devolvieran el pasaporte, apareció un señor bajito con un papel en la mano y dos nombres escritos en él. El de un holandés que como yo esperaba pacientemente y el mío. Le señalé el papel diciéndole que era yo, me preguntó que que hacía le dije que esperando el pasaporte me dijo que bien, bien y se puso a mi lado acompañándome en la espera, eso si muy sonriente.
 Por fin salimos el señor bajito y sonriente el holandés y yo. Allí estaba Carlos con un jefe de su empresa que había sido el de los desembolsos, satisfechos los dos por las cervecitas con que habían amenizado la larga espera y digo larga por que fuimos los últimos en salir del aeropuerto y además porque pensaban que el de los Países Bajos y yo habíamos salido antes gracias a ellos. Ah! "C'est la vie!".

EL VIAJE

El viaje fué agradable a pesar de lo que duró. Saboreé cada momento e intenté no preocuparme por nada. Si tenía que surgir algún problema surgiría y entonces habría que solucionarlo. De nada serviría preocuparme antes (El tiempo dedicado a mis búsquedas y lecturas sobre pensamiento positivo empezaba a dar sus frutos). Bueno eso o la genética, vamos que salgo a mi padre que era un hombre tranquilo.
 Lo del idioma había sido una de mis preocupaciones, así que al pisar suelo francés eché mano de todo mi encanto para dirigirme a los empleados del aeropuerto y decirles en francés que no sabía hablar francés "et voilà" la cosa surtió efecto. Recé para que mi necesidad de vocabulario no superase lo aprendido en el colegio: los saludos, las presentaciones, las partes de una casa, las del cuerpo humano, el material escolar, los parentescos...Vamos lo típico que no te sirve de nada en un aeropuerto. Pero pensé yo: el día que surja un desayuno de esos en condiciones con sus croisanes, su mantequilla y su confitura ese día lo bordo.
 El cambio de aeropuerto también había sido otra preocupación, había sido en vano. Fue un trayecto en autobús de unos cuarenta y cinco minutos que me dejó en la terminal a la que yo iba en el aeropuerto Charles Degaulle. Aquí tuve que esperar algunas horas después de volver a facturar mi equipaje pero no pude concentrarme en lectura ninguna porque andaba embobada ante tantas y tan diferentes personas.
  El color de la piel iba del blanco más blanco ese de los guiris que en el sur de España se ponen rosa chicle al más oscuro como el ébano.
 En el avión yo iba sentada entre un togolés y un norteamericano de Meryland. Fueron compañeros de viaje agradables e  hicimos piña para ayudarnos al final del viaje a rellenar la tarjeta de inmigración (Era para vernos ayudarnos los tres cada uno en su lengua patria español, francés e inglés). Pero en fin ya estaba en Togo.

ESPIRITU AVENTURERO


 Hoy comienzo este blog para compartir con vosotros nuestras experiencias lejos de casa. Comencé escribiéndole correos a mi hermana contándole mi viaje, mi llegada a Lomé y nuestra estancia en la casita de la playa. Por lo visto le han gustado también le han hecho gracia y espera con impaciencia el siguiente; además de haberme pedido permiso para compartirlo con más gente.
 Mi marido vino a Togo por segunda vez para tres semanas, de eso hace seis meses. Pero visto  lo visto en España no le queda otra que estar lejos de los suyos y yo he venido a acompañarle para hacerle más llevadera su estancia en Lomé.
 Aquí nos vemos formando parte de "la movilidad exterior de nuestro país" como diría alguna de las personas que andan haciendo como que gobiernan nuestro país. Aunque os aseguro que no estamos a cinco mil kilómetros de nuestra familia por nuestro "espíritu aventurero" como diría otra. Mi marido y yo tenemos razones de más peso: una hipoteca y un erte lanzado por la empresa para la que él trabaja.
A pesar de todo nos sentimos afortunados por formar parte de los españoles que podemos seguir pagando.